miércoles, 3 de octubre de 2007

El comercio de sangre

















Quote:
"Sin Ley
Para otros robar
Quemar
La tierra de otros
Luchar
Por otros sangrar
Sin Dios
Matar a morir
"

Moraleja: Todo el mundo tiene un precio



Buenos tiempos para los mercenarios.

En Irak, la empresa Blackwater de asesinos a sueldo, parece que se ha pasado de la raya. Y así se lo ha hecho entender el congreso de los Estados Unidos (¡un hosanna por la gloriosa nación vigilante!), de corte demócrata. Ultimamente este congreso de norteamericanos (entiendase este vocablo como retrasados) le ha traido más de un dolor de cabeza al señor Bush, rey del mundo.

Volviendo a Blackwater. Son genuinamente americanos. Su fundador, Erik Prince, fué un soldado de élite del ejército de las cincuentaytantas estrellas. Sus empleados, rifle en mano, no olvidan ponerse las gafas de sol de sheriff del condado, seguramente ni cuando comen. No contentos con cobrar por el asesinato de los demás, y demostrando que aman su trabajo, desde Marzo del 2004 llevan reuniendo un sinfín de despropósitos(entiendase este vocablo como asesinato de civiles). Desde matar de un disparo en el pecho a un iraquí que estaba sentado en la acera(seguramente planeando un nuevo atentado suicida) hasta segar la vida de un guardaespaldas del vicepresidente Irak, en plena nochebuena y con alcohol de por medio.

Giro argumental. Avisados estais. La edad media. Ya existían los mercenarios, por supuesto. Los caballeros andantes cobraban sus servicios de protección a nobles y plebeyos( menos nuestro Don Quijote que, como buen español, solo buscaba tirarse a Dulcinea), pero siempre desde el honor y siempre y cuando la causa fuera justa desde su punto de vista. ¿Es honorable matar civiles desde un coche y no parar ni para ver el estado de los heridos?.

Pero no todo son malas noticias. Al menos en Faluya, cuatro matasietes de Blackwater fueron asesinados y mutilados (¡Oh! lo que ha dicho!)

El dinero nenes. Ese es el secreto detrás de todo. Cantidades ingentes de ese metal que nos produce orgasmos y dolor por igual, con una pasión casi casi sadomasoquista.Erik Prince ha donado 225.000 dólares a la causa republicana. La única manera de agradecerlos: contratar a estos tejanos de mierda y gastarse la friolera de 1000 millones de dólares en ellos. Desde el gobierno,claro. Con el dinero de los retrasados (lease norteamericanos).

¿Y no somos todos mercenarios, al fin y al cabo?. Todos hacemos cosas que nos disgustan a cambio de dinero. Solo hay q ver al pobre Rajoy, diciendo día tras día tonterías. ¿Creeis que un hombre de su edad le gusta que se le vea como un perfecto payaso?. Pero bueno, cobra lo suyo. Y todos contentos.

De mercenarios esta el mundo lleno. Por dinero o por cualquier otra cosa, todos nos vendemos. ¿Donde estan esos caballeros andantes?. Seguramente escondidos, esperando a que pasen los años en los que los que el dinero señorea nuestras almas y en los que el honor provoca risa con solo mencionarlo.

Buenos tiempos para los mercenarios, oh yes.

1 comentario:

victor dijo...

Un dato que aporto a tu noticia.
Blackwater combatió codo con codo con las tropas españolas durante la Guerra de Irak. Buena compañía nos hacía tener Aznar.

Su ilustre señoría

Madrid, Madrid, Spain